- Tené a mano el kit de limpieza que incluye el audífono (cepillo y toallita seca).
- No se debe utilizar ningún líquido ni sustancia desinfectante.
- Cepillá suavemente la rejilla de los micrófonos para quitar cualquier resto de suciedad y/o polvo.
- Cepilla el domo (c.c oliva), ubicado en la parte inferior del receptor para eliminar restos de cerumen, suciedad o polvo.
- Limpiá el audífono, el tubo receptor y el domo con la toallita seca.